viernes, enero 04, 2013

AUTE en El VicTOriA EugEnia


Otra de las cosas pendiente que tenia era ver en directo a Luis Eduardo Aute y por fin lo he logrado; el pasado día 28 de diciembre tras el intento fallido por la suspensión  de hace un par de años en el Baluarte de Iruña. Aute se presentaba en el teatro Victoria Eugenia de Donosti , ni cortos ni perezosos agarramos el automóvil y nos fuimos para allí .
Soy un gran fan de Aute de toda la vida Poseo en vinilo gran parte de lo que hizo durante los setenta y ochenta.
Una de las primeras canciones que aprendí con la guitarra fue.. como no, su inmortal clásico "Al alba"  y desde entonces poco a poco me introduje en su personal mundo de pinturas, cine y poemarios.
El viernes 28 en un Victoria Eugenia casi lleno, con alguna calva en los palcos, el concierto se iniciaba con la proyección de su película de animación "El Niño y el Basilisco". Tras el cortometraje Aute y su banda saltaron al escenario y comunicó a todos los presentes que esa noche iba a tocar integramente su ultimo disco?????.
Ok (pense), ningún problema, me encanta todo lo que está haciendo este hombre ultimamente, sin ir mas lejos su disco del 2003 "Alas y Balas" es mi preferido de su extensa discografia.
Los 160 minutos que duro el concierto estuve practicamente en la gloria disfrutando de cada una de las notas, de cada una de las palabras que soltaba el maestro, que como  irónicamente dijo, estaba encantado
de estar esa noche en un sitio tan "feo" y tan "cutre" como el Victoria Eugenia.

Toco integramente "El niño que miraba al mar"  junto con canciones de sus ultimas obras. En el tercer bis de la noche, ya el solo con su guitarra, tras reivindicar la masturbación con un cachondo monologo se despidió tocando tres de sus grandes clásicos.
Visto lo visto, tenemos Aute para rato y en buena forma ya que este hombre no envejece sino que se transforma en un gran Basilisco día a día.
Hasta la próxima.

FELIZ  Y PROSPERO 2013/URTE BERRI ON



SIN VIVIR

Y según pasa el presente
y el pasado se hace añejo,
se me tuerce algún reflejo
por lo que ando mal escorado,
para atrás, como el cangrejo,
cada día más perplejo
por buscar alguna forma
de entender.

Esta trampa, esta broma,
esta guerra, esta espada,
esta piedra, este coma,
esta noche, esta nada,
este largo sinvivir,
esta muerte que es vivir
sin ti.
Es un sinvivir, la vida sin ti,
es un sinvivir.

Y porque no estoy de acuerdo
con la lógica del dato,
busco los tres pies al gato
para ver si así consigo,
invocando a lo insensato,
no caer en desacato
por buscar alguna forma
de entender.

Y a pesar de quienes dicen
que, a la luz de la experiencia,
se ilumina la prudencia
y se apaga el sentimiento,
sólo veo que tu ausencia
me conduce a la demencia
de buscar alguna forma
de entender.